El Serval (Leptailurus serval). Es un felino que desde que lo vi por primera vez en un documental me gustó, se me hacía curioso su forma, sus proporciones, patas largas, cuerpo más o menos largo, cabeza pequeña y orejas grandes, sobretodo lo que llama más la atención es eso, su cabeza y orejas.
Es un tamaño medio, los machos son más grandes que las hembras. Mide entre 67 y 100 cm, más de 24 a 45 cm de la cola y pesa de 8 a 18 kg. Es de constitución esbelta, con cola no muy larga, cabeza pequeña en relación al resto del cuerpo y orejas grandes. Destacan sus largas patas, que le permiten ver mejor en las praderas de hierbas altas donde vive más frecuentemente, y su pelaje amarillento con motas negras. Son buenos corredores y aunque no suelen subirse a los árboles, pueden escalar bastante bien.
El serval es un depredador que se alimenta de pequeños animales. Sus presas más comunes son roedores y aves de tamaño medio, excepcionalmente algunas especies de antílopes. A su vez, son cazados ocasionalmente por leopardos y con mucha más frecuencia por el hombre, pues su piel se considera muy valiosa a lo largo y ancho de África.
Las hembras paren de 2 a 4 crías por camada, tras un período de gestación de entre 60 y 65 días, que crían en solitario en una madriguera abandonada por otro animal, con frecuencia el cerdo hormiguero.
Los servales jóvenes pueden ser domesticados, pero son difíciles de mantener en cautividad porque no suelen reconocer la jerarquía impuesta por sus dueños; a pesar de ello, cada vez se les ve más como mascotas exóticas en Estados Unidos. En este país se han producido cruces exitosos de servales con caracales, unos felinos ligeramente emparentados, e incluso con gatos domésticos, lo que ha originado una nueva y rara raza de felinos domésticos, los gatos "Savannah".
Fotos de interés:
Serval albino
Serval melánico
Sin más desde mi blog...
Un Saludo y hasta otra entrada.
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