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Mostrando entradas de octubre, 2021

El volcán sin nombre II

     Y la lava llegó, tenía ciertas esperanzas de que no lo hiciera. Pero ha seguido desplazándose, a veces lenta, otras, rápida, engullendo todo a su paso. Llegó a La Laguna, el barrio de mis bisabuelos, de mi abuela y tío-abuelos, de mis tíos, primos y parientes.       Ayer el monstruo se comió la gasolinera y continuó amenazante hacia la plaza donde ya sucumben los centenarios laureles y aguarda expectante la iglesia de San Isidro Labrador, donde di el último adiós a mi abuela en misa. Pocas horas quedan para que atrapen en su negro manto las preciadas viviendas de mi familia, donde solo quedará el recuerdo.      Yo aprecio mucho la memoria, los recuerdos e historia de los antepasados y los lugares. Uno de los proyectos que estaba escribiendo era una novela que rescataba esos recuerdos de mi niñez y las voces y memoria de mis mayores, una novela en la que el protagonista se desenvuelve en La Laguna en torno a unos misterios. Puede que la retome, a modo de homenaje, cuando las colada

El volcán sin nombre.

Compartí esto en mi página personal de Facebook.      Me sentí muy pequeño, diminuto, casi insignificante, ante el volcán que surgió en La Palma.       Nunca pensé que viviría algo así, poder ver un volcán a unos pocos kilómetros de distancia, sentir su rugido, su latido en forma de explosiones. El suelo vibraba, era como un cosquilleo constante en los pies. Los ríos de lava, las columnas de humo, la ceniza... todo genera miedo y maravilla a partes iguales.      Pero cuando me detengo a pensar en las viviendas que fueron y están siendo afectadas siento una tristeza enorme y no hay palabras para reconfortar esas pérdidas. Pero alguien dijo una vez, donde hay vida hay esperanza.       Ya se venía anunciando, cada vez era más probable que estallara, desde mi posición solo pude sentir dos temblores, otros es posible que los sintieran todos.       Lo vi en directo en la televisión canaria. Algunos tuvieron la suerte de verlo surgir en persona.       Y como mi abuelo llevó en su taxi a mi pa